Los biólogos deben ser eclécticos sobre el origen y evolución de la vida

El científico mexicano Antonio Lazcano Araujo participa en la Cátedra Latinoamericana “Julio Cortázar”

Para hablar sobre el origen de la vida, el biólogo y científico mexicano Antonio Lazcano Araujo regresa a la Universidad de Guadalajara, y por primera vez participa en la Cátedra Latinoamericana “Julio Cortázar”, para enfatizar que los biólogos deben tener una actitud ecléctica respecto al conocimiento. “Todo biólogo, por definición, tiene que estar interesado en la evolución”, por lo que “si algo entendemos rápidamente, es que tenemos que ser muy ecléticos; tenemos que tomar información de la paleontología, la embriología, la biología general, la biología molecular, la genómica, no podemos desdeñar ninguna de estas áreas, y todas son igualmente importantes para entender el fenómeno de la vida”, dijo el biólogo. Lazcano Araujo, profesor y responsable del Laboratorio Origen de la Vida de la UNAM, así como miembro de El Colegio Nacional, participó en el seminario “El mundo del RNA”, este lunes en el Centro Universitario de Ciencias Biológicas y Agropecuarias (CUCBA), donde conversó por más de dos horas con estudiantes y académicos que llenaron el auditorio de usos múltiples “Dra. Luz María Villarreal de Puga”. El científico habló sobre el origen de la vida, tema “inacabable” y que cambia, ya que la investigación es multi e interdisciplinaria y quienes la estudian se nutren de descubrimientos, por ejemplo, de astronomía. También habló de la historia y la evolución de las ideas en torno a la molécula del ácido ribonucleico (RNA). El RNA fue una entidad biológica tratada como el “patito feo” de la biología subcelular; “una molécula que era vista como un medio intermediario, pero que ahora nos damos cuenta de que juega un papel absolutamente central, no sólo en los procesos celulares”, sino que es indispensable para entender el origen y la evolución temprana de la vida. Lazcano Araujo recordó a científicos como Charles Darwin, Aleksander Oparin, Ernst Haeckel, entre otros. Por ejemplo, del primero destacó su obra El origen de las especies, de 1859. “Uno puede dividir, no sólo a la biología sino a toda la cultura, en antes de Darwin y después de Darwin”. El libro llega a México “en un momento espléndido, cuando los conservadores habían sido derrotados y había el empeño por construir una cultura con una república laica; Darwin es aceptado de inmediato por los liberales, y por buena parte de los mexicanos que se dan cuenta de que no es una teoría que esté buscando acabar con una visión religiosa o mística, sino que es una teoría que explica, en realidad, la diversidad biológica”. Este martes,Lazcano Araujo dicta la conferencia magistral “La chispa de la vida” en el paraninfo Enrique Díaz de León de la UdeG, a las 18:00 horas. Entrada Libre.

Texto: Eduardo Carrillo
Fotografía: Leticia Espinoza