Avanza desecación de árboles de limón persa en Jalisco

UdeG contribuye a mejorar el rendimiento del cultivo y ha disminuido la muerte de árboles con trabajos de nutrición y buen manejo

Las enfermedades manchan el limón persa de Jalisco. Al no tener semilla, es el cítrico con mayor demanda para exportación y concentrados –según la Sagarpa– y el cual es afectado por el Huanglongbing (HLB) o “Dragón amarillo” y el secado de árboles, situación que preocupa a productores de la región y a académicos de la Universidad de Guadalajara (UdeG). “Lo que estamos enfrentando es que se empiezan a secar, no sabemos la razón. De repente está el limón bonito y luego se seca una rama, se corta y luego se seca otra”, señala Rubén Beas López, agricultor de San Martín Hidalgo, una de las principales zonas productoras de este fruto en Jalisco. Dicho fenómeno se repite en otras huertas, y de acuerdo con Justo Camacho Barreto, Presidente del Sistema Producto Limón Persa en Jalisco, se trata de un problema serio que avanza con prisa, el cual de propagarse de manera fuerte, impactaría en la producción y hasta el encarecimiento del producto. El doctor Víctor Manuel Medina Urrutia, investigador del Departamento de Producción Agrícola, del Centro Universitario de Ciencias Biológicas y Agropecuarias (CUCBA) de la UdeG, calcula que este mal causa la muerte de entre 3 y 5 por ciento de árboles al año en el Estado. Apuntó que aún no están bien definidos sus agentes causales, por lo que precisó que se requiere más investigación y financiamiento para determinarlos. Otro problema es el HLB, ocasionado por la bacteria Candidatus liberibacter spp y transmitida por el insecto volador Diaphorina citri, que afecta en el rendimiento y calidad de la fruta. Según el investigador, su presencia está distribuida en todas las zonas citrícolas adultas de México, pero en Jalisco no es tan agresiva como la que afecta al limón mexicano en Colima, donde los árboles pierden hasta 50 por ciento de producción en un tiempo corto. Éstos y otros males impactan tanto en el rendimiento como en la calidad del fruto, por lo que académicos y estudiantes del CUCBA, como parte de una serie de investigaciones, realizaron un manejo nutricional del cítrico tanto a nivel experimental como en huertas. Uno de los resultados fue que con el uso de biofertilizantes comerciales aumentaron la producción hasta ocho toneladas promedio por hectárea. Además, aminoraron la muerte de los árboles. “Mientras que en los árboles donde se aplican los productos sintéticos tenemos alrededor de 5 por ciento de árboles muertos por año, en este caso tuvimos 0.5 por ciento, la diferencia es bastante fuerte”, dijo Medina Urrutia. Agregó que con estos productos se logró que la fruta se conserve más tiempo verde, aspecto importante

porque el limón persa depende completamente del mercado de exportación. De acuerdo con el Sistema Producto Limón Persa en Jalisco, la entidad tuvo 7 mil 202 hectáreas sembradas en 2016, con una producción en toneladas de 88 mil 261, de las cuales se exportó entre 70 y 75 por ciento. México produce tres tipos de limón: el mexicano (pequeño, con semillas y es ácido), el persa (más grande que el mexicano y menos ácido), y el italiano (hay variedades con y sin semilla, además se corta de color amarillo). En fechas pasadas fue realizada la Feria Internacional del Limón Persa, en San Martín Hidalgo, en la que el académico del CUCBA ofreció una conferencia sobre innovación para la producción de limón persa.

Texto: Eduardo Carrillo
Fotografía: Fernanda Velázquez